La actual ciencia oficial afirma que la Atlántida de Platón, el Diluvio Universal y el Arca de Noe son simples patrañas o cuentos bíblicos ; pero en la mayoría de las culturas existen mitos similares sobre una inundación universal que exterminó a la humanidad en un tiempo remoto.
¿De dónde provienen esos mitos? ¿Por qué, a pesar de proceder de culturas que no guardan relación entre sí, describen unas historias tan semejantes? ¿Por qué están cargados de un simbolismo común?
Hubo realmente algo parecido a un diluvio universal. Hubo una o más civilizaciones avanzadas antes de la historia conocida que fueron destruidas.
Cuando los científicos rechazan el Diluvio universa bíblico y a Noé y a su Arca como si fuera una fábula; los científicos están ignorando que hay cientos de mitos de diluvios en todas las culturas.
El método científico establece teorías para explicar unos hechos, pero otros hechos se dejan de lado. Los hechos que ignora la teoría del paradigma aceptado se denominan anomalías. La anomalías son evidencias, realidades que no encajan en la teoría científica aceptada.
Cuando una evidencia (anomalía) contradice las teorías científicas, la comunidad científica tienden a filtrarla. Los científicos tienden a eliminar u ocultar las evidencias que no se ajustan al paradigma políticamente correcto. No se enseñan no se discuten y la gente en general ni siquiera se entera de ello.
Prácticamente, todas las razas y pueblos cuentan entre sus leyendas con la del hombre (por lo general junto a su familia) que por gracia divina; se salva de un castigo en forma de diluvio universal; que termina con los humanos y los animales.
En la mayoría de los casos, este elegido de los dioses salva una pareja de cada especie animal; y junto a sus familiares conforma la nueva generación de la raza humana. Se puede decir que es el único acontecimiento que toda la humanidad ha compartido casi al mismo tiempo.
Pero más allá de las leyendas y creencias, lo que nos puede acercar a la verdad es, sin lugar a dudas, la prueba arqueológica. Se sabe que más del 75% de la tierra está formada por depósitos sedimentarios; y hay lugares como en la India donde los hay de hasta veinte kilómetros de profundidad.
Hay un dato sorprendente: los geólogos han encontrado en los depósitos sedimentarios, cantidades de fósiles entre los que aparecen restos humanos, animales, plantas y utensilios, todo mezclado.
Se ha llegado a la conclusión que para que se produjese este hecho fue necesaria la presencia de un medio aglutinante; que moviera todo en la misma dirección y que todo quedara en un lugar, para ser sepultado por el aluvión.
Incluso se han encontrado fósiles de insectos en los que no hay huellas de desintegración, lo que habla de una muerte súbita y de un enterramiento casi instantáneo.
Esto es característico de un hecho ocasionado por una gran ola de agua, seguida de un asentamiento de todas las partículas en flotación. Quizás la gran prueba ;la definitiva de esta catástrofe sería encontrar la nave que salvó a una familia y a un grupo de animales; la famosa Arca, que dicen las crónicas se encuentra atrapada en la cumbre del Monte Ararat; un lugar de nieves eternas y de difícil acceso.
A pesar de varias expediciones fallidas que solo han conseguido rescatar trozos de antiguas maderas fosilizadas; y de fotos satelitales que muestran dos grandes masas oscuras que parecen ser la nave (la que se habría partido), nada aún permite afirmar categóricamente la existencia.
Estos relatos demuestran que, aunque cambien los nombres, Xisutros sería el Ziusudra sumerio; lo mismo que el Atrahasis asirio, el Noé bíblico, el pastor Inca; el Manú hindú, el Nu-wah chino y el Uta-Napishtim babilónico, además de tantos otros de diferentes culturas.
Quizás todos hacen referencia a un único relato,un diluvio universal tal vez muy relacionado con sobrevivientes de Atlántida; Lemuria o alguna de las civilizaciones sepultadas por las aguas; allá en los comienzos olvidados de nuestra historia, o para mejor decirlo, de una de nuestras historias.
https://historiasobreelorigendelhombre.blogspot.com/2011/02/la-humanidad-antes-del-diluvio.html